
El artista, que llevaba retirado de la interpretación desde hacía años, padecía desde el año 2002 una enfermedad degenerativa similar al síndrome de Alzheimer, que implica desde sus primeros estadios la pérdida de memoria y un deterioro paulatino de las funciones vitales.
Fue el propio actor, hace unos años, el que anunció públicamente que sufría este mal, que también afectó al actor y ex presidente de EEUU, Ronald Reagan, uno de sus amigos.
Pese a la dureza del trance, Heston mantuvo hasta el último momento una gran entereza y compostura, similar a la que aplicó a sus papeles históricos, ya fuera en el tiempo de los romanos con 'Ben Hur', o en el futuro, con 'El planeta de los simios'.
Con su constitución atlética, sus rasgos marcados y su timbre de voz, Heston encajó perfectamente en el tipo de estrella que Hollywood buscaba para sus grandes producciones de los años 50, en los que la industria buscó inspiración en
Heston, que logró el Oscar en 1959 por 'Ben Hur', una de las películas más aclamadas de la historia, también será recordado como el Moisés de 'Los diez mandamientos' y el héroe de la reconquista española, Don Rodrigo Díaz de Vivar, en 'El Cid'.
También participó en otras grandes producciones, como "55 días en Pekín", "Titanic", "Terremoto" y "El planeta de los simios", historia en la que volvió a participar cuando interpretó un pequeño papel en la nueva versión de Tim Burton.
Además de retirarse del cine, Heston, de claras convicciones republicanas, se vio obligado a abandonar su actividad pública al frente de
No obstante, atrás queda una carrera cinematográfica legendaria, que sin duda le convirtió en uno de los grandes iconos masculinos de la industria, en los que interpretó más de 70 películas, con personajes como Moisés, Miguel Ángel, el cardenal Richelieu y El Cid.
No hay comentarios:
Publicar un comentario